Torroella de Montgrí. La leyenda de la Torre de les Bruixes y la consagración de la iglesia de Sant Genís

La Torre de les Bruixes (La Torre de las Brujas) forma parte de la muralla que rodeaba la antigua villa de Torroella de Montgrí, municipio situado en el Baix Empordà (provincia de Girona). Esta imponente construcción datada del siglo XV – XVI, fue una de las torres de defensa y su presencia ha dado lugar al nacimiento de una singular leyenda que tiene como protagonistas la consagración de la iglesia de Sant Genís, el rey Pere el Cerimonós y las brujas ampurdanesas. He observado que en algunos textos se confunde la Torre de les Bruixes, con la Torre del Portal de Santa Catalina. Para aclarar dicha confusión hay que decir que la Torre de les Bruixes se trata de la construcción de planta circular que se encuentra frente a la Plaza Empordà. Por contra la Torre del portal de Santa Catalina, presenta planta rectangular y corresponde a la construcción que forma parte del portal homónimo situado en la Avenida Lluís Companys.

Torre de les Bruixes, s. XV – XVI, frente a la Plaza Empordà

No voy a extenderme en la valoración de la leyenda como patrimonio cultural inmaterial, pero sí quiero reivindicar la necesidad de proteger, divulgar y transmitir a futuras generaciones, estos relatos como muestra de la riqueza de la cultura popular. Algunas leyendas incluyen en su relato bienes culturales y patrimoniales los cuales, son objeto de estudio por parte de la Historia del Arte. En el caso que nos ocupa parte de la leyenda transcurre en la emblemática Torre de les Bruixes y tiene como eje del relato, la consagración del la iglesia parroquial de Sant Genís de Torroella de Montgrí.

El recinto amurallado

Durante la Edad Media Torroella de Montgrí contó con un recinto amurallado que experimentó al menos dos ampliaciones y una importante modificación a finales del siglo XVI. La primera muralla solo rodeaba un castro o castillo el cual aparece citado en un documento datado el 1085. Este castro se hallaba emplazado en el lugar que hoy ocupa el Palau lo Mirador. Posteriormente la muralla experimentó una ampliación, abarcando además del castro, la iglesia y las viviendas de los siervos. Se trata de la zona conocida como la Cellera. A finales del siglo XIV Torroella de Montgrí se convirtió en Vila Real ampliándose el trazado de la muralla como consecuencia de la expansión urbanística. La nueva muralla trascurre a lo largo de lo que hoy es la Avenida Lluís Companys (norte), Paseo de Catalunya (este), Paseo de Vicenç Bou (sur), Plaza Quintana i Combis, Plaza d´Espanya y Calle del Roser (oeste).

De todas las torres con que llegó a contar la muralla, (cuatro de planta cuadrada y dos de planta circular), solo se han conservado dos: la Torre del Portal de Santa Caterina y la conocida como la Torre de les Bruixes.

Iglesia de Sant Genís junto al Palau lo Mirador. Aunque las primeras noticias documentales corresponden al siglo XIV, el templo no se consagró hasta 1609
El Portal de Santa Caterina, siglos XIV – XV, situado al norte de la muralla medieval en la actual Avenida Lluís Companys. Se trata del único portal que incluía una torre. Según la leyenda la comitiva real accedió a Torroella a través de este portal
Nicho con la imagen de santa Caterina frente al portal homónimo. Estas pequeñas imágenes situadas en los portales, cumplían una función protectora sobre los puntos de acceso y salida de la población

La Torre de les Bruixes, un punto de encuentro de las brujas ampurdanesas

Cuenta la leyenda que el rey Pere el Cerimoniós (1319 – 1387) contribuyó económicamente en la construcción de la iglesia de Sant Genís, mediante la aportación de las rentas comarcales. Una vez finalizada la obra, el monarca fue invitado por las autoridades de la villa a la consagración del templo. Al evento también debían acudir los obispos de Urgell, Osona y Girona quienes se unirían a la comitiva real en Figueres, el día 1 junio.

Para tan destacado acontecimiento, el alcalde de la localidad reunió a cónsules y clérigos para recibir al séquito real. Además decidió apostar a dos guardas en la torre del campanario para que dieran el toque cuando avistasen a la comitiva. Pero por alguna razón que la leyenda no aclara, los guardas no avisaron. Se dice que tal vez andaban distraídos o que el encargado de dirigir la comitiva, erró de ruta al llegar a Ullà y tomó el camino equivocado de los olivares en lugar del de la era de coure. El caso es que cuando el rey llegó a Torroella, nadie le estaba esperando. Al pasar junto a la Torre de les Bruixes se encontró con el «avi Xixó» (el abuelo Xixó), personaje bien conocido por sus tratos con las brujas. El avi, que estaba apostado frente a la puerta, cumplía la misión de impedir la entrada de la comitiva real. La torre era en realidad lugar de encuentro entre las brujas de Ullà, Torroella y Gualta desde donde partían hacia el Canigó, para celebrar sus aquelarres. El avi consiguió su objetivo ya que los caballos de la comitiva se encabritaron negándose a cruzar la puerta y obligando al rey y a su séquito, a entrar en Torroella por el Portal de Santa Caterina. En ese instante los guardas apostados en el campanario, dieron el toque de aviso y las autoridades acudieron rápidamente al encuentro del monarca y sus acompañantes.

Tramo de la muralla medieval que discurre entre el Portal de Santa Caterina y la Torre de les Bruixes

Una vez consagrada la iglesia, Pere el Cerimoniós expresó su deseo de esclarecer el motivo que había provocado tal excitación en los caballos. Para ello reunió al clero y a sus consejeros y tras deliberar, llegaron a la conclusión de que el fenómeno estaba relacionado con la brujería. Sin demora el monarca mandó al batlle real D. Josep Ardèvol, que aquel mismo día tapiara la puerta de la torre para que las brujas no pudiera entrar más en la villa. Pero al sábado siguiente apareció una gran obertura en la puerta tapiada. Rápidamente se procedió a tapiar de nuevo pero al sábado siguiente, la puerta volvió a aparecer en las mismas condiciones y así tantas veces como se tapiaba, se volvía a abrir. Ante tales hechos, las autoridades municipales decidieron apostar a dos guardias frente al lugar pero éstos, desaparecieron misteriosamente sin dejar rastro mientras que la obertura en el tapiado, volvía a aparecer una y otra vez.

La tradición quiso que mientras hubiera brujas en Torroella, la obertura en la puerta siguiera apareciendo. Y así fue hasta que un buen día, les fetilleres decidieron abandonar la villa y desaparecieron misteriosamente. De esta forma el gran orificio en la puerta adjunta a la Torre, no volvió a aparecer nunca más. Como recordatorio de los hechos, todavía puede distinguirse la diferencia en el tapiado de la zona superior de la puerta, bajo las dovelas. Dice la leyenda que esta diferencia se debe a los sucesivos emparedados.(1)

Puerta de las Brujas, junto a la torre que lleva el mismo nombre. En la parte superior, bajo las dovelas, distinguimos un tipo de piedra de menor tamaño que según la leyenda, se debe a los sucesivos tapiados

La consagración de la iglesia de Sant Genís. Más allá de la leyenda

Ya que la leyenda tiene como eje central la consagración de la iglesia de Sant Genís, me parece interesante exponer los hechos documentados referentes a dicha consagración. El templo no se consagró hasta el 3 de mayo de 1609. (2) Por fortuna contamos con la descripción completa de la ceremonia de consagración, recogida en el volumen I del Llibre d´Òbits de Torroella de Montgrí.

El templo fue consagrado por Monseñor Francisco Arévalo de Suazo, obispo de Girona. Mm. partió de dicha ciudad el día 2 de mayo, acompañado por un numeroso séquito formado por los síndicos de Torroella, Antoni Farriol y Guillem Calvet, más otros habitantes de la villa todos ellos desplazados hasta Girona, para acompañar al obispo en su trayecto. La comitiva llegó a Torroella cuando ya había anochecido y accedieron por la zona sur, pasando por el Ter. A su llegada fueron recibidos por los presbíteros beneficiados de la parroquia: Mn. Anton Deulofeu, Mn. Grabiel Pol, Mn. Nicolau Begur y Mn. Dalmau Gerona acompañados por una multitud de habitantes. Así mismo se hallaban presentes los cónsules Magí Coll, Joan Torró y el Clavari Josep Camps, vestidos con sus gramallas y atributos de ediles y acompañados por escuadra de arcabuceros.

Para recibir a la comitiva, se encendieron diversas fogatas en las cuatro torres y luminarias en el castillo de Montgrí. Se lanzaron cohetes en las montañas del Putx Gros y Mont Pla y se encendieron fuegos en la ermita Santa Caterina. De las paredes de la muralla, del exterior de la iglesia y alrededores, colgaba gran cantidad de farolillos de papel. La comitiva cruzó el Portal de Sant Josep o de Ter que da acceso a la calle Mayor la cual, se llenó de luminarias y lámparas de aceite hasta la posada del Señor Bisbe (Portella). El cronista asegura que había tantas luminarias, que parecía de día (era tanta la luminaria per tota la vila que paria era de dia).

Punto de emplazamiento del desaparecido Portal de Sant Josep o del Ter, situado al final de la Calle Mayor al sur de la muralla. A través de este portal, la comitiva accedió a la villa de Torroella el 2 de mayo de 1603

El obispo pernoctó en la casa principal de la la villa, próxima a la iglesia, conocida como de Na Pastella. Al día siguiente 3 de mayo, Día de la Santa Cruz, tuvo lugar la ceremonia de consagración que se prolongó desde las 6 hasta las 10 de la mañana. El documento informa de que el interior del templo se hallaba bellamente adornado con flores, gallardetes y banderas.

Finalizada la consagración se celebró la misa del pontificado asistida por el Rd. Geroni Puigvert, arcediano de l´Empordà, de la Seo de Girona, el Rd. Garau de St. Martí, canónigo de la Seo, por Baldiri Batlla, subdiácono y por el Rd. Miquel Çacoromina, ambos canónigos. Entre ellos se encontraba el Prior Gabriel Olmeda y el Prior de Sant Tomàs de Fluvià, Rd. Francesc de Mayà. Finalizado el oficio tuvo lugar la procesión con la participación de los arcabuceros. El acceso al templo se llevaba a cabo por la puerta de poniente llamada de St. Genís, a pesar de que la fachada aún no estaba construida en 1609.(3) La puerta orientada a mediodía tampoco existía. Ésta no se inició hasta 1735-39. (4) Con el fin de paliar el efecto de la falta de portada, se decoró con guirnaldas y gallardetes toda la zona desde la puerta de Sant Genís, hasta la reja del cementerio. (5) Esta reja quedaba frente de la ventana del castillo. Se trata de la única ventana con capitel románico y podemos verla aún cerca del Portalet. Dicha reja discurría por la esquina de la fachada de poniente del jardín del Mirador, y a lo largo del muro que transcurre hoy frente al Paseo de l´Església.

La antigua ventana románica del castillo es la que se halla situada más próxima al Portalet el cual vemos en la imagen. Frente a la ventana discurría la reja del antiguo cementerio

Como todas las leyendas la que acabamos de exponer, mezcla elementos reales con elementos fantásticos. Este recurso es habitual en el ámbito legendario como también lo es la inclusión de componentes que son familiares para la comunidad. Ambos recursos tienen como objetivo otorgar mayor credibilidad al relato. En este sentido hemos de mencionar que las murallas de Torroella, fueron reparadas en tiempos del rey Pere el Cerimoniós. De esta forma se vincula un hecho histórico (la relación del rey Pere con el recinto amurallado aunque la Torre date de los siglos XV-XVI y no de XIV), con uno fantástico. Por otro lado la presencia de brujas es frecuente dentro del legendario ampurdanés lo cual, no hace más que poner de manifiesto el temor social hacia unas mujeres a las que se les otorgaba la capacidad de controlar los fenómenos atmosféricos y perjudicar al ganado. En una sociedad rural y agrícola el control de la climatología y la supervivencia de los animales era vital, ya que una mala cosecha o la muerte de los animales, podía significar la ruina absoluta para el campesino.

Post registrado bajo licencia Safe Creative Commons Attribution-NonCommercial-ShareAlike 4.0 International (CC BY-NC-SA 4.0). Este artículo ya había sido publicado en mi anterior blog el día 20 marzo 2020

Referencias

(1) Leyenda, recogida por Marcelí Audivert según tradición oral a través de Narcís Duran, publicó en el Llibre de Festa Major de Torroella, 1949. Audivert, p. 216 – 218
(2) Recorgemos el relato de la obra de Josep Vert i Planas cuya fuente es A.P.T. Libre Obits Vol. I fol. 167. Ver VERT i PLANAS, Josep. El Temple Parroquial de Sant Genís, (monografies montgrinenques nº 4), Torroella de Montgrí, Museu del Mongrí, Centre d´Estudis i Arxiu- Ajuntament de Torroella de Montgrí, 1984, p. 87-88 y 103 – 104
(3) La fachada de poniente no se inició hasta 1759. Llibre d´Obits. VERT i PLANAS, Josep. El Temple Parroquial de Sant Genís, (monografies montgrinenques nº 4), Torroella de Montgrí, Museu del Mongrí, Centre d´Estudis i Arxiu- Ajuntament de Torroella de Montgrí, 1984 p. 98
(4) Ididem, p. 24
(5) El actual cementerio de Torroella de Montgrí no se halla lejos de la antigua necrópolis situada al amparo de la iglesia de Sant Genís. La eliminación de los cementerios parroquiales y su posterior transformación en espacios públicos, es el resultado de la secularización de los recintos funerarios iniciado en el siglo XVIII. El actual cementerio de Torroella de Montgrí se encuentra en la calle Josep Carner, al otro lado de la Avenida Lluís Companys y data de al menos de 1817, año en que se trasladaron a esta nueva ubicación los restos del antiguo cementerio

BIBLIOGRAFÍA

AUDIERT, Marcel-lí. Torroella de Montgrí una vila singular, Barcelona, Editor Marcel-lí Audivert, 1983
BITRIÁN i BAREA, Carlos; CAMPOS i PIERA, Carmen. «Estudi de la forma urbana de Torroella de Montgrí» en Col-lecció Recerca i Territori. Beques de Recerca Joan Torró i Cabratosa, VII, nº 3, Girona, Diputació de Girona, 2011, p. 131 – 226
DURÁN, Narciso. «La Torre de les Bruixes (leyenda)» en Llibre de la Festa Major de Torroella de Montgrí, 1949
PERICOT, Joan. «Les Portes de Torroella» en Llibre de la Festa Major de Torroella de Montgrí, 1969
ROVIRAS, Antoni; TORRENT, Enric. Torroella i l´Estartit, Quaders de la Revista de Girona, Monografies locals, nº 65, Girona, Diputació de Girona, 2003
VERT i PLANAS, Josep. El Temple Parroquial de Sant Genís, (monografies montgrinenques nº 4), Torroella de Montgrí, Museu del Mongrí, Centre d´Estudis i Arxiu- Ajuntament de Torroella de Montgrí, 1984

Recursos electrónicos

Col-lecció Recerca i Territori. Beques de Recerca Joan Torró i Cabratosa, VII, nº 3, Girona, Diputació de Girona, 2011. Disponible en: https://www.museudelamediterrania.cat/pujades/files/RIT3.pdf

2 respuestas a «Torroella de Montgrí. La leyenda de la Torre de les Bruixes y la consagración de la iglesia de Sant Genís»

  1. La cultura popular y las leyendas forman parte del patrimonio inmaterial y un valuoso legado que se transmite de generacion en generacion. Quien no tien presente el recuerdo de los abuelos explicando sus maravillosas e increibles aventuras . Gracies Mercè por tus maginificas aportaciones y por tus estudios que tanto nos enriquecen

    1. Hola Margarita! me alegro muchísimo de que te haya gustado el post.
      Ciertamente las leyendas forman parte del patrimonio cultural de un pueblo y han llegado hasta nosotros gracias a la tradición oral. Es importante poderlas recoger y dejar testimonio escrito de las mismas, para que puedan ser transmitidas a las futuras generaciones. Como bien dices forman parte de nuestro valioso patrimonio inmaterial.
      Un abrazo
      Mercè/Nur

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